Salmo 4

Plena confianza en el Señor

Del maestro de coro, con

instrumentos de cuerda.

Salmo de David.

Dios y defensor mío,

¡contéstame cuando te llame!

Tú, que en mi angustia me

diste alivio, ¡ten

compasión de mí y

escucha mi oración!


Ustedes, que se creen grandes

señores, ¿hasta cuando

ofenderán mi honor?, ¿hasta

cuando desearán y buscarán lo

que no tiene sentido,

lo que sólo es falsedad?

Sepan que el Señor prefiere

al hombre que le es fiel;

sepan que el Señor me escucha

cuando lo llamo.

¡Tiemblen y no pequen más!

Ya acostados, y en silencio,

examinen su propia conciencia;

ofrezcan sacrificios sinceros

y confíen en el Señor.


Muchos dicen: ¿Quién nos

mostrará la dicha? ¡Señor

miranos con buenos ojos!

Tu has puesto en mi corazón

más alegría que en quienes

tienen trigo y vino en

abundancia. Yo me acuesto

tranquilo y me duermo

enseguida, pues tú, Señor,

me haces vivir confiado.